démodé

Ha pasado ya más de un año desde que el genio Alexander McQueen falleció.

Pero su presencia sigue tan intacta, fuerte y latente como si continuara vivo. Porque una obra tan descomunal como la suya es un recordatorio eterno de la intensidad de su espíritu.

Un espíritu que no desaparecerá jamás y que, desde sus primeras presentaciones, mostraba la fuerza para transformar todo, para transgredir y para explorar nuevas y diferentes formas de belleza.

Apasionado, romántico, espiritual, poco convencional… McQueen, un artista que a través de la moda se mostraba al mundo tal cual era, dejando expuestos sus sentimientos ante todos, ya fueran amor, furia, oscuridad, belleza, euforia…

Honor a quien honor merece, y este año el Metropolitan Museum of Art de Nueva York presenta una exposición retrospectiva de toda la obra de este inigualable diseñador, que lleva por nombre Savage Beauty. A partir del 4 de mayo y hasta el 31 de Julio, esta es la primera revisión del trabajo del artista después de su muerte.

Organizada por The Costume Institute y curada por Andrew Bolton, la retrospectiva incluye trabajos desde su colección de graduación de 1992, pasando por su trabajo para Givenchy, hasta sus últimas creaciones presentadas posteriormente de su muerte.

“Love looks not with the eyes, but with the mind” dice la frase que Lee llevaba tatuada en su brazo. Una frase que todos deberíamos de llevar tatuada en el corazón.